Cada 3 de febrero se celebra el día de San Blas, un santo muy venerado especialmente en zonas rurales y pueblos de tradición agrícola. Su figura está ligada tanto a la religión como al cuidado de la salud —especialmente de la garganta—, y ha dado lugar a una rica colección de dichos populares. Los refranes de San Blas forman parte de la sabiduría popular y suelen referirse al clima, los ciclos naturales, la salud, e incluso al comportamiento humano.
Estas frases, transmitidas de generación en generación, han servido durante siglos como referencia para saber si el invierno seguía con fuerza o si ya se acercaba la primavera. Además, el día de San Blas solía ir acompañado de fiestas, bendiciones de alimentos y ritos tradicionales. Todo esto se refleja en un lenguaje sencillo, directo y cargado de simbolismo.
En este artículo exploramos los refranes de San Blas más populares, analizamos su significado y te mostramos cómo siguen teniendo sentido incluso en tiempos modernos.
¿Quién fue San Blas y por qué es tan citado en los refranes?
San Blas fue un obispo y médico del siglo IV, conocido por realizar curaciones milagrosas. La tradición cuenta que salvó a un niño que se estaba ahogando con una espina de pescado, razón por la cual se le considera protector de las enfermedades de la garganta. En muchas regiones de España y América Latina, durante el día de San Blas se bendicen roscas, cordones y alimentos que, según la creencia, protegen durante todo el año.
Pero además de su carácter religioso, San Blas marca un momento importante en el calendario rural. A comienzos de febrero, los agricultores observaban el clima con atención para predecir cómo se comportaría el resto del invierno. Así nacieron muchos refranes de San Blas basados en la observación de la naturaleza.
Refranes de San Blas más conocidos y su significado
1. “Por San Blas, la cigüeña verás, y si no la vieres, año de nieves”
Uno de los refranes más conocidos. Hace referencia al regreso de las cigüeñas tras el invierno. Si no se las ve ese día, se espera que el frío aún continúe.
2. “Por San Blas, una hora más”
Este dicho no se refiere al cambio de hora oficial, sino al hecho de que los días empiezan a alargarse visiblemente tras el solsticio de invierno.
3. “Por San Blas, besugo atrás”
Este refrán hace alusión al fin de la temporada del besugo, un pescado típico en navidades. Se usa también como señal del final de un ciclo festivo.
4. “Por San Blas, el invierno atrás”
Una expresión optimista que indica que, a partir de esa fecha, el invierno comienza a debilitarse y se acerca el cambio de estación.
5. “Por San Blas, tu ave verás”
Una variante del refrán de las cigüeñas. En zonas rurales, se usaba para señalar el regreso de ciertas aves migratorias que marcaban el cambio de tiempo.
Refranes menos conocidos de San Blas, pero igual de interesantes
“San Blas bendito, cúrame la garganta y el apetito”
Un dicho jocoso que mezcla la devoción religiosa con las ganas de comer bien, muy propio de las fiestas populares.“Por San Blas, la sombra verás; si la ves, frío tendrás”
Este refrán alude a la observación de si el sol brilla el 3 de febrero. Si hay sombra, puede haber continuidad del invierno, en una tradición parecida al Día de la Marmota.“El cordón de San Blas, sano te mantendrá”
Hace referencia a la costumbre de llevar un cordón bendecido durante nueve días alrededor del cuello como protección contra los males de garganta.“San Blas, con frío te has de dar”
Un recordatorio de que, pese a los primeros signos de cambio, todavía es invierno y hay que seguir abrigado.
El valor de los refranes de San Blas en la actualidad
Aunque ya no dependemos del clima para sobrevivir como en el pasado, los refranes de San Blas siguen teniendo valor cultural y simbólico. Nos enseñan a:
Observar la naturaleza, en lugar de depender solo de aplicaciones meteorológicas.
Valorar la tradición oral, que une generaciones con sabiduría sencilla pero profunda.
Reflexionar sobre el paso del tiempo, el cambio de estación y los ritmos naturales.
Mantener vivas las costumbres populares, como la bendición de alimentos y el uso del cordón de San Blas.
Además, estos refranes nos conectan con nuestras raíces, con la vida en el campo y con un modo de entender el mundo más cercano y respetuoso con el entorno.
Cómo usar los refranes de San Blas hoy en día
Aunque muchas personas ya no celebren esta festividad, los refranes siguen siendo útiles en muchos contextos:
En redes sociales, para dar un toque tradicional a una publicación de invierno.
En blogs, colegios o libros, como parte de contenidos culturales o lingüísticos.
En decoración estacional, para colgar en carteles o agendas en febrero.
En celebraciones locales, para recordar costumbres ancestrales.
En conversaciones cotidianas, como una forma simpática y sabia de comentar el clima.
Conclusión:
Los refranes de San Blas son mucho más que frases antiguas. Son parte de la memoria colectiva de los pueblos, un reflejo de cómo la gente observaba la naturaleza y entendía el mundo. Nos hablan del frío, de las aves, del tiempo que pasa y de la esperanza de que la primavera está cerca. Así que, cuando llegue el 3 de febrero, no mires solo el calendario… mira al cielo, escucha al pueblo y recuerda: “Por San Blas, la cigüeña verás.”