Boris Becker es un ex tenista alemán que ganó seis títulos Grand Slam, dos Copa Davis y una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, además de 49 torneos individuales y 15 dobles.
Becker es actualmente muy conocido no solo por el éxito que obtuvo en el tenis, sino también por haber sido hace 20 años víctima de una paternidad forzosa; la modelo Angelika Ermakova le practicó una felación y luego utilizó el semen para concebir. Así nació Anna, quien de esta manera es hija de Becker pese a que él nunca dio su consentimiento.
Se trató de un suceso sin precedentes al menos hasta ese momento, motivo por el que el alemán fue víctima del ambiente mediático y su situación se dio a conocer en muchos países.
Sin embargo, y en un contexto muy complicado ya que su mujer le había pedido el divorcio tras enterarse del hecho, Becker debió reconocer la paternidad y abonarle cinco millones de dólares a Ermokova.
Otros inconvenientes de Becker y la actualidad de sus hijos
En octubre de 2002, aún golpeado por toda la situación que le había costado también el divorcio con su mujer, Becker fue acusado de evasión de impuestos durante su permanencia en Alemania entre 1991 y 1993. A su vez, declaró vivir en el paraíso fiscal de Mónaco, lo que rápidamente se comprobó que era mentira.
El ex tenista fue multado por 500 mil dólares con libertad condicional durante un lapso de dos años y, además, fue obligado a pagar todos los gastos de la corte. Aunque Becker había ganado más de 20 millones de dólares con el tenis, sus deudas y su situación judicial se complicaban cada vez más.
Tal fue así que a mediados de 2017 el alemán fue declarado en bancarrota por el tribunal británico, el cual consideró que no estaba en condiciones de abonar la deuda correspondiente al intento de rehipotecar una propiedad en Mallorca.
Así y todo, Becker saca provecho de grandes beneficios que ostentó a lo largo de los años; hace dos meses posó junto a sus otros dos hijos (Noah y Elías) en la gala celebrada en el Verti Music Hall de Berlín, donde, cabe destacar, Anna, su otra hija, estuvo ausente.
Boris Becker ha padecido momentos muy complicados que, de todos modos, no le impiden ser recordado como uno de los tenistas más exitosos de todo el mundo ni tampoco disfrutar de sus hijos y de todos los premios y reconocimientos.