Frases de Joaquín Sabina un cantautor, poeta y pintor español. Ha publicado diecisiete discos de estudio y siete en directo, y ha colaborado con distintos artistas cantando dúos y realizando otras colaboraciones.
Frases de Joaquín Sabina
- Que no te den la razón los espejos.
- Bastante trabajo me ha costado cometer mis pecados como para malbaratarlos en arrepentimientos vanos.
- No pido perdón, ¿para qué? Si me va a perdonar, porque ya no le importa.
- No es que no quiera. Es que no quiero querer…
- La noche que perdiste el miedo al miedo fue tan corta que dura todavía.
- Le di mis noches y mi pan, mi angustia, mi risa, a cambio de sus besos y su prisa.
- Allá donde se cruzan los caminos, donde el mar no se puede concebir, donde regresa siempre el fugitivo, pongamos que hablo de Madrid.
- Toma mi dirección; cuando te hartes de amores baratos de un rato… me llamas.
- El agua apaga al fuego y al ardor los años. Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño.
- No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió.
- ¿De qué hubiera servido deshacer las maletas del olvido?
- Derrochando la bolsa y la vida la fui poco a poco dando por perdida.
- Y la vida siguió, como siguen las cosas que no tienen mucho sentido.
- Sabes mejor que yo que hasta los huesos, sólo calan los besos que no has dado.
- Se arroparon con la sensatez del desvarío tuyo y mío.
- Antes de que me quieras como se quiere a un gato me largo con cualquiera que se parezca a ti.
- Cuando la muerte venga a visitarme que me lleven al sur donde nací. Aquí no queda sitio para nadie.
- Este pez ya no muere por tu boca, este loco se va con otra loca, estos ojos no lloran más por ti.
- Estos labios que saben a despedida, a vinagre en las heridas, a pañuelo de estación
- No te pases un pelo de listo, no inviertas en cristos, no te hagas el tonto.
- Pelearé hasta el último segundo y mi epitafio será: no estoy de acuerdo.
- No soy un fulano con la lágrima fácil, de esos que se quejan solo por vicio… Si la vida se deja yo le meto mano y si no aún me excita mi oficio.
- Y algunas veces suelo recostar mi cabeza en el hombro de la luna y le hablo de esa amante inoportuna que se llama soledad.
- El traje de madera que estrenaré no está siquiera plantado, que el cura que ha de darme la extremaunción no es siquiera monaguillo.
- A las flores de un día, que no duraban, que no dolían, que te besaban, que se perdían.
- Las niñas ya no quieren ser princesas, y a los niños les da por perseguir el mar dentro de un vaso de ginebra.
- Porque todos los finales son el mismo repetido, y con tanto ruido, no escucharon el final.
- Todo lo que tengo que es nada se lo di.