Según los últimos datos facilitados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, los fallecimientos por accidente laboral han aumentado en casi un 5 % con respecto al año pasado. Desde infartos y derrames cerebrales en el puesto trabajo, incluyendo accidentes de tráfico y caídas graves, la mortalidad durante el desarrollo de las funciones laborales ha aumentado. Y ello a pesar de que cada vez más empresas se ven obligadas a cumplir con las normativas de seguridad.

Sin embargo, los accidentes laborales no cesan. De ahí que conocer la indemnización por fallecimiento del trabajador sea cada vez más necesario, dadas las circunstancias actuales. En este sentido, es importante saber que se considera accidente laboral a toda lesión corporal que se sufra durante el ejercicio de las funciones propias del puesto de trabajo. En función de esta definición se tendrá derecho o no a indemnización.

Qué hacer ante un fallecimiento por accidente laboral

Ante una situación en la que fallece una persona en el ejercicio de sus funciones laborales, lo primero que hay que hacer es avisar a los servicios de emergencias. La empresa deberá elaborar la correspondiente parte de accidente y la Inspección de Trabajo, tan pronto tenga conocimiento de ello, abrirá una investigación. A su vez, la Policía será la encargada de levantar un atestado con los hechos.

Una vez hecho esto, los familiares de la persona fallecida tendrán derecho a indemnización si el accidente de trabajo se ha producido por descuido o incumplimiento de las normas de seguridad por parte de la empresa. Aunque, si la conducta imprudente ha sido por parte del trabajador, también se le considera accidente de trabajo. Para calcular la indemnización lo mejor es consultar con abogados de accidentes laborales para salir de dudas.

No obstante, y en líneas generales, las pólizas de seguro de las empresas cubren las indemnizaciones recogidas en los convenios colectivos. Pero también existen indemnizaciones por daños y perjuicios en función de las circunstancias en las que se haya producido el accidente laboral y siempre y cuando los hechos demuestren que la responsabilidad de dicho accidente recae sobre la empresa.

Los familiares directos, ya se trate del cónyuge, descendientes, ascendientes o hermanos y allegados de la persona fallecida, tienen derecho a reclamar indemnización. La cual cubre tanto los daños personales como los patrimoniales derivados del fallecimiento. Puesto que el cálculo de la cuantía es complicado y se realiza en función del procedimiento, lo aconsejable siempre es dejarlo en manos de abogados especialistas.

A qué se tiene derecho por accidente laboral

Si el accidente laboral no ha causado el fallecimiento, igualmente se puede tener derecho a una indemnización por daños y perjuicios, siempre y cuando la responsabilidad no recaiga en el propio trabajador. En este sentido, conviene saber que los trabajadores disponen de un plazo de un año para reclamar dicha indemnización desde que se estabilicen las secuelas del accidente laboral.

Otro aspecto importante a tener en cuenta es que el desplazamiento de casa al trabajo y viceversa se considera accidente laboral. Es decir, que, si una persona sale de su domicilio para ir a trabajar y sufre un accidente en el camino, en su propio vehículo o en un medio de transporte público o privado, se considera accidente de trabajo. Eso sí, siempre y cuando haya un tiempo razonablemente próximo a su horario de entrada y salida de trabajo.

Por otra parte, las enfermedades originadas por el desarrollo de las funciones propias del puesto, también se consideran accidente laboral. Obviamente con los debidos informes y pruebas por parte de los servicios de sanidad pública. Así, que, ante cualquier situación de accidente en el entorno de trabajo, lo mejor es ponerse en contacto con abogados especialistas, los cuales normalmente responden en un margen de 24 horas.

 

El papel de los abogados especialistas

Ante cualquier accidente laboral, hay que consultar con abogados especialistas en la materia. Además, muchos de estos profesionales tienen plataformas online desde las que atienden a los trabajadores de manera gratuita. Es decir, solo cobrarán un porcentaje si se recibe indemnización. También garantizan el cobro de la máxima cantidad por dicho concepto y un trato totalmente personalizado. Eso sí, conviene no firmar nunca ningún documento antes de consultar con el abogado para no exponerse a pérdida de derechos o abusos empresariales.

Los empresarios pueden aprovechar el desconcierto y las circunstancias del accidente para hacer firmar renuncias o tratos desventajosos a los trabajadores. A fin de cuentas, las empresas tienen como objetivo ganar el máximo dinero posible y si para ello pueden ahorrarse una indemnización por accidente laboral, estarán encantados de hacerlo. No hay que olvidar que la picaresca está siempre presente entre los empresarios españoles de cualquier sector, sobre todo en los más precarizados como la hostelería, repartidores, empleadas de hogar y personas que se dedican a la ayuda a domiclio.

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